Los niñ@s muy nerviosos vivieron una experiencia inolvidable, donde pudieron ver todas las instalaciones de los caballos, tocarlos, e incluso subir en una yegua que nos preparó Olga y José. Cada uno de ellos experimentó la sensación de estar tan cerca de estos animales que tanto llaman la atención de los pequeños.
Queremos dar las gracias a Olga y a José por dejarnos visitar a su maravillosa yeguada y por todos y cada uno de los detalles que tuvieron con nuestros pequeñ@s en todo momento.